lunes, 10 de agosto de 2015

REFLEXION

Juan 8:3     Entonces los escribas y los fariseos le trajeron una mujer sorprendida en adulterio; y poniéndola en medio, 4 le dijeron: Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en el acto mismo de adulterio. 5 Y en la ley nos mandó Moisés apedrear a tales mujeres. Tú, pues, ¿qué dices?

Aquí podemos notar un moviento muy astuto del enemigo, se trata de intentar desviar la atencion del publico que estaba oyendo las enseñanzas del Señor, con el fin de que ya no se le preste atención, lograr que se salgo de lo que estaba haciendo, para poder acusarle, los escribas y fariseos ni si quieran estaban interesados en escuchar al Señor, pero si estaban interesados en que la gente lo dejara de escuchar, es por eso que interrumpen arbitrariamente en su tiempo de enseñanza, muchas veces van a suceder este tipo de cosas en los momentos cuando estamos haciendo la labor que nos fue encomendada, un niño llora, entra una llamada, llega alguien a preguntar, suena el timbre, etc, y de alguna manera logran desviar nuestra atención o la de los oyentes, y es que cuando estamos haciendo lo que el Señor nos mandó vamos a encontrar siempre quien se interponga para que lo hagamos, ellos en ese momento le llevaron un caso muy complejo, ademas de no estar escuchando sus enseñanzas, y de venir a interrumpir lo que el estaba enseñando, el caso es muy complicado, ahora noten algo, se dirijen a el con esta palabra, Maestro, es importante hacer incapie en ella pues ellos no era que le reconocieran como tal, solamente estaban buscando la manera de lisonjearle, para que de alguna manera él se confiara, y como suele suceder con las personas que cuando los alagan, se sienten muy grandes y terminan haciendo lo que el que los halaga quiere, le presentan este caso, esta mujer fue sorprendida en el acto mismo del adulterio, preguntemos un poco como es posible que alguien sea sorprendido en ese acto, es algo que no se hace en la calle, tratemos de imaginar la situación, como la acusacion era de adulterio, debemos tener presente que esta mujer era casada, de otra manera no sería adulterio sino fornicación, ademas para que fuera sorprendida en el mismo momento de estar haciendolo, muy seguramente el que estaba con ella, era de uno de los que la acusaba, sino diganme como puede ser sorprendido alguien en algo tan intimo como eso?, acaso será que ella lo estaba haciendo a la vista de todos?, estoy seguro que no, ahora dejando de lado los hechos del adulterio, tenemos que mirar la situacion que ellos le plantean, la ley de Moises, su deseo era poner a prueba lo que enseñaba, pues era importante para ellos, tener de que acusarlo, si desconocia la ley, facilmente iba a caer en su trampa, y si la hacia cumplir tambien iba a ser condenado pues con que autoridad dictaba sentencia sobre ella, como ven es una trampa muy bien gestada, algo digno del mentiroso y padre de mentira, la ley dice que tales mujeres deben ser apedreadas, tu pues que dices? en otras palabras juzga tu, esta situación, dinos que hacer, como te hemos dicho Maestro, creete con el poder de juzgar y así podremos nosotros acusarte.

Como podemos ver el plan de ellos, era una maquinación, muy bien diseñada, para que pudieran segun ellos tener una motivacion para acusarlo, y muchas veces nosotros vamos a encontrar personas que quieran hacer lo mismo con nosotros, lo importante es que no podemos crecernos con las lisonjas que ellos pronuncien, es algo para lo que debemos estar muy atentos, pues facilmente el enemigo tratará de ponernos en una condición de esas, para que despues tengamos que abochornarnos, y avergonzarnos, no se trata de juzgar nosotros nada, sino dejar que sea Dios atravez de su palabra el que haga las cosas, por eso no debemos apresurarnos a decir nada, sino confrontar con las escrituras lo que Dios dice, si esto hacemos no caeremos en el lazo del diablo, recordemos siempre que es la palabra de Dios la que debemos exponer no nuestros argumentos.

Oh Señor, ayudanos te lo ruego a no dejarnos llevar por pensamioentos de hombres, a no tratar de hacer nada que tu no hallas mandado, sino a estar atentos a cumplir tu voluntad, y dejar que tu Espirtu en nosotros nos guie en cada momento, ayudanos a estar alertas en esos ataques que el enemigo nos quiera hacer.

BENDICIONESSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS

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