Juan 7:18 El que habla por su propia cuenta, su propia gloria busca; pero el que busca la gloria del que le envió, éste es verdadero, y no hay en él injusticia.
Es importante recalcar estas palabras del Señor, cuando nos hace ver que en ninguna manera Él estaba buscando ser engrandecido, pues su unico deseo en la vida era anunciar a su Padre, esto es lo que hace la diferencia en torno a los que hoy se levantan como cristos fasos, como profetas, y disque apostoles, ellos estan buscando su propia gloria, y quieren ser reconocidos por los hombres, quieren tener grandeza, poder, mover masas, y ser tenidos en cuenta para las cosas que los otros quieran hacer, quiero hacer una pequeña comparacion, cuando usted recibe la visita de un cartero en la puerta de su casa, le abre la puerta, le da desayuno o almuerzo, le sienta en un lugar fresco y le da atenciones especiales? cierto que no? porque? porque para usted lo que importa es lo que él le trae, no el cartero como tal, es indiferente quien sea si alto o bajo, gordo o flaco, etc, la importancia no es para el cartero sino para la carta, lo mismo pasa hoy somos enviados a llevar un mensaje, y lo que importa es el mensaje, el mensajero pasa a un segundo plano, lo que debe importar para nosotros es llevar bien ese mensaje, y saber que debemos decirlo tal y como nos fue encomendado, no podemos añadirle ni quitarle, no podemos tomarmos atribuciones como si el mensaje fuera nuestro, toda la importancia debe ser para aquel que nos envió como mensajeros, y si asi lo hacemos la gloria será para el Padre, el dueño del mensaje, eso tristemente es lo que se ha perdido, los mensajeros se han querido tomar el lugar del que los envió, y quieren vivir muy bien a cuenta de un mensaje que no es de ellos, y mucho más se han querido apropiar de la autoria del mensaje, porque estan buscando su propia gloria, eso es lo que el Señor nos quiere hacer ver, siendo el Mismo Dios, no estimó eso como cosa a que aferrarse, sino que se que hizo obediente, y es por eso que puede decir mi mensaje no es mio, sino del que me envió, nunca fue el proposito del Señor buscar que lo engrandecieran a él, siempre tuvo claro que aquien se debe la gloria, honra y honor es al Padre, por eso dijo: todo lo que pidieres al Padre en mi nombre lo haré para que el Padre sea glorificado, en otras palabras su unico deseo en la vida es que el Padre reciba la gloria, por eso en él no hay injusticia, y por eso es que él es verdadero.
Una pregunta que no podriamos hacer es; buscamos nosotros la gloria del Padre, así como lo hace el Señor? es nuestro deseo que en todo la gloria sea para Él? cierto que la respuesta muchas veces será un rotundo NO? aunque algunos quieran mostrarse como piadosos y quieran decir que si, encontraremos que no es verdad, pues vemos en ellos un aire de orgullo cuando de pronto alguien les dice que como ellos hacen las cosas si está bien, notemos algo nunca el Señor busco la aceptacion de los hombres, de hecho por eso los atacaba con todo queriendo que ellos llegaran a humillarse, los judios se caracterizaban por eso, se creian mejor que los demas pueblos, ellos se habian subido como la espuma, y no querian que nadie los cuestionara, ellos pensaban de si mismos que eran unos seres muy humildes, muy consagrados, muy diferentes a los demas y eso los llenó de un orgullo que los apartó por completo de darle la gloria al Padre, es lo mismo que pasa hoy, hombres hechos de barro, que se creen mucha cosa, y se hacen servir por algo que no es de ellos, como los que cantan, que quieren ser alabados ellos cuando supuestamente alaban a Dios, y predicadores que se creen con el derecho de cobrar sumas exhorbitantes por enseñar a otros, como si fuera algo propio, olvidando esto que dijo el Señor, cuando les preguntó a sus discipulos quien dicen los hombres que soy? y ustedes quien dicen? y Pedro contesta: tu eres el Cristo el Hijo del Dios Altisimo, el Señor no le dijo, bien Pedro, que grande eres, tu si que sabes, eres un duro, que bueno que te tengo en mi equipo, que haria yo sin ti, NOOOO por el contrario dijo; Bienaventurado eres Pedro, porque esto que acabas de decir no te lo reveló ni carne ni sangre, sino Mi Padre que está en los Cielos.
Oh Señor ayudame a no creerme nada, a no buscar mi gloria, a no pensar que soy muy sabio, a no creerme mas que otros, y a buscar que siempre la Gloria sea para ti Oh Padre amado, gracias porque es por ti que soy, no por mi, gracias porque eres tu quien me guia, y son las pisadas de tu Hijo las que quiero seguir. ayudame Señor te lo ruego.
BENDICIONESSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS
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